Hoy hablaremos sobre los beneficios del magnesio. El magnesio es un mineral esencial para el ser humano, y su importancia no puede ser subestimada. El magnesio desempeña un papel crucial en procesos como la producción de energía, la síntesis de proteínas, la contracción muscular y la regulación del sistema nervioso. Sin embargo, muchas personas no obtienen suficiente magnesio en su dieta diaria, lo que puede llevar a una serie de problemas de salud.
Sin magnesio, la mayoría de nuestras enzimas no podrían funcionar correctamente o no se activarían. Estas “catalizan” (o aceleran y optimizan) las reacciones metabólicas del cuerpo, incluyendo la contracción muscular, el mantenimiento de los niveles sanguíneos de glucosa y el adecuado funcionamiento del sistema nervioso. La deficiencia de este mineral puede llevar a problemas, tales como fatiga crónica, debilidad muscular, estreñimiento o dificultad para conciliar el sueño entre otros.
El magnesio es fundamental para la salud ósea, ya que contribuye a mantener los huesos en condiciones normales y se usa para el dolor de huesos o en condiciones de desgaste e inflamación de las estructuras óseas. La deficiencia de magnesio puede aumentar el riesgo de osteoporosis y fracturas.
Este mineral desempeña un papel importante en la regulación del ritmo cardíaco porque ayuda a estabilizar y a reducir la frecuencia cardíaca, lo que puede ser beneficioso para personas con condiciones cardíacas.
El magnesio es uno de los principales agentes antioxidantes del organismo. La deficiencia de este mineral puede afectar directamente el perfil de lipidos, lo que puede contribuir al estrés oxidativo y la inflamación. El magnesio regula la actividad de las enzimas de óxido nítrico el cuál es una molécula con propiedades antioxidantes que además tiene una importante función vasodilatadora.
Tipos de Magnesio
El magnesio puede encontrarse en varias formas químicas, y cada una tiene características y beneficios específicos para la salud. Algunas formas son más adecuadas para ciertos problemas de salud que otras, por lo que es importante conocer las diferencias entre los tipos de magnesio más comunes.
Citrato de magnesio
El citrato de magnesio es una de las formas más comunes y de fácil absorción. Se suele usar para tratar el estreñimiento, ya que tiene un leve efecto laxante. Esta forma de magnesio es ideal para personas que buscan mejorar su digestión y aliviar problemas relacionados con el tránsito intestinal. Además, el citrato de magnesio es una buena opción para mantener niveles saludables del mineral en el cuerpo debido a su alta biodisponibilidad.
El cloruro de magnesio es otra forma absorbible y se usa para mejorar la salud celular, la función muscular y la hidratación. Esta forma es común en los suplementos y se encuentra también en los aceites de magnesio que se aplican tópicamente para aliviar dolores musculares y articulares. Al aplicarse sobre la piel, el cloruro de magnesio puede penetrar rápidamente en los tejidos, proporcionando alivio localizado y absorbiéndose en el sistema.
El óxido de magnesio
El óxido de magnesio es una de las formas más comunes, aunque tiene una menor biodisponibilidad en comparación con otras formas. Se usa principalmente como un laxante o antiácido para tratar el estreñimiento o el reflujo ácido. Aunque su absorción en el cuerpo es limitada, sigue siendo eficaz para aliviar problemas digestivos.
El glicinato de magnesio es una de las formas más suaves y mejor toleradas para el sistema digestivo, lo que lo convierte en una excelente opción para personas que buscan evitar el efecto laxante de otras formas de magnesio. Además, el glicinato de magnesio se utiliza a menudo para reducir la ansiedad, mejorar la calidad del sueño y apoyar la función neurológica, gracias a su capacidad para promover la relajación al actuar en el sistema nervioso.
El L-treonato de magnesio es una forma relativamente nueva que ha ganado popularidad debido a su capacidad para atravesar la barrera hematoencefálica, lo que la hace particularmente efectiva para la salud cerebral. Esta forma de magnesio se utiliza para mejorar la memoria, la función cognitiva y reducir los síntomas de ansiedad y depresión. Debido a sus efectos en el cerebro, el L-treonato de magnesio es una opción interesante para quienes buscan mejorar su salud mental.
El sulfato de magnesio, también conocido como sales de Epsom, es más conocido por su uso en baños terapéuticos. Cuando este mineral se disuelve en agua caliente se absorbe a través de la piel y puede ayudar a aliviar dolores musculares, reducir la inflamación y promover la relajación. Es una opción popular para las personas que buscan aliviar el dolor después de un ejercicio intenso o para aquellos que padecen problemas de inflamación crónica.
Aunque es posible obtener magnesio a través de suplementos alimenticios, también se encuentra en una variedad de alimentos naturales. Algunos ejemplos incluyen:
- Semillas de sésamo (30 mg por cucharada)
- Espinacas (20 mg por 100 gramos)
- Almendras (15 mg por 100 gramos)
En resumen, el magnesio es un macroelemento químico esencial para el ser humano. Desempeña un papel fundamental en la actividad enzimática, la salud ósea, la regulación del ritmo cardíaco y la función antioxidante. Es importante incluir fuentes naturales de este mineral en nuestra dieta y considerar la suplementación si se considera que se está deficiente en este nutriente.
Si buscas para calmar tu sistema nervioso, te recomendamos acudir con tu médico de cabecera y revisar tu salud mental para descubrir el padecimiento, su posible causa o causas y si es necesario consumir este mineral para ayudarte a tratarlo.